Un poeta vuelca el alma en las palabras, enreda con los sonidos de las sílabas, con las curvas de las letras que hila con las descargas de sus neuronas.
Un poeta es un artista que saca de la chistera de su mollera las realidades donde lo mundano no llega.
Un poeta llora, ríe y tiembla mientras bucea en la realidad más adversa en busca de su belleza.
Ser poeta es una suerte a contra luz trazada en el camino, por donde pasea la alquimia con la que se forja el bastón de un peregrino de alma dividida entre la claridad de la Luna y la duda de una espesa bruma.
Ser poeta es una suerte a contra luz trazada en el camino, por donde pasea la alquimia con la que se forja el bastón de un peregrino de alma dividida entre la claridad de la Luna y la duda de una espesa bruma.
Ser poeta es el mejor de los castigos, el más noble de los destinos que se le otorga al caballero, que galopa sobre los sentidos.
POETA ES TODO EL LOCO QUE CREE EN LA CORDURA DEL AMOR.
Autor del texto y de la imagen Matilde Párraga. Todos los derechos reservados
Os Paralamas do Suceso
Assaltaram a Gramática
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